Todos los años se designa en la liga un premio que tiene importancia menor en lo deportivo pero es parte clave en lo humano.
Es el premio al ciudadano ejemplar, que este año ha ido a parar al center de los Bulls Joakim Noah. El premio designa al jugador de la liga que más ha participado en actos para la comunidad y mejor actitud ha tenido fuera de la cancha. El encargado de repartir el J. Walter Kennedy ha sido la asociación de periodistas del baloncesto y la labor de Noah en la reinserción de jóvenes en Chicago a través de su fundación Arca de Noé ha sido el principal motivo para otorgar el premio al pívot francés.
Las iniciativas de Joakim para reducir la violencia en Chicago deben ser una fuente de inspiración para todos en cada una de nuestras comunidades.
Noah sucede de esta forma a Luol Deng, ganador el año pasado.
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