La noche de ayer ponía punto a final a unas de las mejores primeras rondas de la historia, y la película como viene siendo habitual no decepcionó a nadie, si no todo lo contrario. El heroicismo de Chris Paul, lesionado de gravedad desde la mitad del primer cuarto, le puso el toque épico a un choque que nos dió unas sensaciones lo más idénticas posibles a unas finales de la NBA. Y Clippers se llevó la partida.
SAS-LAC: Uno de los mejores partidos de la historia de Playoffs es lo que disfrutamos todos en la madrugada del sábado al domingo. Pocas palabras son las que describen las sensaciones de los aficionados a la mejor liga de baloncesto del mundo cuando el balón fue lanzado al aire sobre las 03:10 horas aproximadamente. Tony Parker, decidido por fin a redimirse tras una muy mala serie se puso a los Spurs a las espaldas y lideró a los tejanos en los primeros liderazgos del choque, mientras que el omnipresente Matt Barnes desde la línea de 3 y cargando el rebote ofensivo ayudaba a Blake Griffin por parte de los Clipps. Con igualdad absoluta en el marcador el momento épico de la eliminatoria llegó a 2 minutos de terminar el primer período, cuando Chris Paul se echó la mano a la zona posterior del muslo en un contrataque. Su salida inmediata al banquillo y sus gestos de dolor y desesperación hacían presagiar lo peor antes de que el base estrella de los Clippers se fuese a vestuarios hasta mediados del segundo asalto. Los Spurs no consiguieron sacar ventaja de la ausencia de Paul, a pesar de que junto a Parker se unió a la fiesta Danny Green, espectacular en el aspecto defensivo a lo largo del choque (llegando incluso a taponar 5 lanzamientos). El cierre de rebote de los hombres grandes de Los Angeles pudo con San Antonio, que veía como Kawhi Leonard no tenía su noche al igual que en el sexto partido.
Paul volvió mediado el segundo cuarto a ritmo de canastas, pero con claros gestos visibles de cojera y dificultades en el movimiento, haciendo que un soberbio Jamal Crawford en el segundo cuarto subiese el balón y liderase el ataque de unos Clippers en los que él más que nunca se limito a hacer de finalizador, con un acierto increíble para el estado físico que mostraba sobre la cancha. Pero no podía perderse el partido más importante de su vida. Con apenas 15 segundos para llegar al descanso, los Spurs sacaron de fondo y Austin Rivers de forma muy ingenua cometió una falta sobre Ginobili en medio campo que los árbitros señalaron como falta de tiro, dando 3 tiros libres más que cuestionables al argentino. Con los ánimo caldeados en el Staples, Chris Paul cogió el balón y sobre la bocina anotó un triple espectacular de 9 metros que daba al ventaja a los Clippers al descanso, en un partido que iba camino de hacer historia.
La historia no cambió tras el descanso, y con mejores sensaciones aparentes de Paul, comenzó su show. 18 puntos en los segundos 24 minutos y una exhibición en el tiro brutal metían una y otra vez en el partido a unos angelinos que veían como Duncan y el propio Green lideraban una y otra vez el ataque de los de Popovich, que cometieron muchos más errores de lo normal en aspecto defensivo. Ya en el último cuarto, la aparición de J.J Redick con 6 puntos prácticamente consecutivos dejaban a un pabellón al borde del ataque hasta que Ginobili y el propio Duncan se encargaban de enfriar el ambiente poniendo a los Spurs por delante. Hasta 31 cambios de líderes en el marcador definen la igualdad de uno de los mejores 7ºs partidos que se recuerdan. Y una serie así tenía que tener un final especial. Paul, que llevaba 25 puntos y había sufrido un segundo pinchazo brutal en último cuarto, cogió la responsabilidad y el balón como ya hicieran Michael Jordan en el famoso Flu Game e Isiah Thomas, y con una penetración a canasta supero con una bandeja inverosimil a Danny Green y Tim Duncan, anotando a tabla la canasta que ponía a los Angeles 2 arriba a falta de 1 segudno para el final.
El Staples se vino abajo y las caras de los jugadores de SA se veían reflejadas en un Tim Ducan que comentaba con Doc Rivers en la recta final del choque: "¿De verdad esto es una primera ronda?. Los Spurs pidieron timeout y la última jugada diseñada para Leonard mediante pase directo fue repelido por Matt Barnes, dando a los Clippers la victoria y poniendo la puntilla final al triple doble de Blake Griffin y a la épica actuación de Chris Paul. El base, llorando de dolor y felicidad al final del encuentro felicitó uno a uno a los vigentes campeones, con especial emoción en el abrazo a su amigo Tim Duncan, dejándonos una de las imágenes para el recuerdo. Quien sabe si es el último partido profesional de Duncan, a pesar de que Popovich admitió en la rueda de prensa posterior que los Spurs volverían el año que viene.
Paul volvió mediado el segundo cuarto a ritmo de canastas, pero con claros gestos visibles de cojera y dificultades en el movimiento, haciendo que un soberbio Jamal Crawford en el segundo cuarto subiese el balón y liderase el ataque de unos Clippers en los que él más que nunca se limito a hacer de finalizador, con un acierto increíble para el estado físico que mostraba sobre la cancha. Pero no podía perderse el partido más importante de su vida. Con apenas 15 segundos para llegar al descanso, los Spurs sacaron de fondo y Austin Rivers de forma muy ingenua cometió una falta sobre Ginobili en medio campo que los árbitros señalaron como falta de tiro, dando 3 tiros libres más que cuestionables al argentino. Con los ánimo caldeados en el Staples, Chris Paul cogió el balón y sobre la bocina anotó un triple espectacular de 9 metros que daba al ventaja a los Clippers al descanso, en un partido que iba camino de hacer historia.
La historia no cambió tras el descanso, y con mejores sensaciones aparentes de Paul, comenzó su show. 18 puntos en los segundos 24 minutos y una exhibición en el tiro brutal metían una y otra vez en el partido a unos angelinos que veían como Duncan y el propio Green lideraban una y otra vez el ataque de los de Popovich, que cometieron muchos más errores de lo normal en aspecto defensivo. Ya en el último cuarto, la aparición de J.J Redick con 6 puntos prácticamente consecutivos dejaban a un pabellón al borde del ataque hasta que Ginobili y el propio Duncan se encargaban de enfriar el ambiente poniendo a los Spurs por delante. Hasta 31 cambios de líderes en el marcador definen la igualdad de uno de los mejores 7ºs partidos que se recuerdan. Y una serie así tenía que tener un final especial. Paul, que llevaba 25 puntos y había sufrido un segundo pinchazo brutal en último cuarto, cogió la responsabilidad y el balón como ya hicieran Michael Jordan en el famoso Flu Game e Isiah Thomas, y con una penetración a canasta supero con una bandeja inverosimil a Danny Green y Tim Duncan, anotando a tabla la canasta que ponía a los Angeles 2 arriba a falta de 1 segudno para el final.
El Staples se vino abajo y las caras de los jugadores de SA se veían reflejadas en un Tim Ducan que comentaba con Doc Rivers en la recta final del choque: "¿De verdad esto es una primera ronda?. Los Spurs pidieron timeout y la última jugada diseñada para Leonard mediante pase directo fue repelido por Matt Barnes, dando a los Clippers la victoria y poniendo la puntilla final al triple doble de Blake Griffin y a la épica actuación de Chris Paul. El base, llorando de dolor y felicidad al final del encuentro felicitó uno a uno a los vigentes campeones, con especial emoción en el abrazo a su amigo Tim Duncan, dejándonos una de las imágenes para el recuerdo. Quien sabe si es el último partido profesional de Duncan, a pesar de que Popovich admitió en la rueda de prensa posterior que los Spurs volverían el año que viene.
- Chris Paul: 27 pts 6 ast.
- Blake Griffin: 24 pts 13 rbt 10 ast.
- Tim Duncan: 27 pts 11 rbt.
- Danny Green: 16 pts 8 rbt 5 tapones.
COLD:
- Kawhi Leonard: 5/13 TC 13 pts.
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